jueves, 30 de agosto de 2007

Pongan huevo que ganamos!


Los que venimos de familias machistas y patriarcales con ideas de antaño (y no tan de antaño) sabemos en carne propia que el fútbol siempre fue un elemento para medir nuestra virilidad. Mi familia, machista si las hay, es un fiel ejemplo de esto que estoy diciendo. La mesa se distribuye por género y así se administra la conversación. Los hombres en una punta analizando el penal de Suecia en el segundo tiempo del mundial del 34 contra algún país del África. En la otra punta, las mujeres hablando de los precios de Coto y esas cosas que aprendieron que tienen asignadas. Yo, en el medio sin tener nunca en claro hacia adónde sentarme.
Es increíble como el fútbol permite que salgan afuera todas las cosas que hoy por hoy que somos tan progres, a fuerza de año 2000, serían políticamente incorrectas. Los descalificativos “negro”, “puto” y demás están a la orden del día y con total legitimidad. Testosterona or not testosterona, that is the question… La cosa se trata de poner huevos, de tener huevos y de hacer gala de ellos (ojalá fuera mostrándolos!). Ese es el quid de la cuestión y por eso es que se mide la portación de testosterona de calidad según el rendimiento futbolístico de la persona. Ni hablar, en este sentido, de la vez que en un torneo intercolegial al que me obligaron a jugar, claro, estaba sólo frente al arco y un contrario pateó con toda su furia y la pelota se me venía encima, directo a mi cabeza… era mi cabeza o gol!.... me agaché!! Jajaja… imaginénse que mi testosterona descendió inescrupulosamente ese día! Creo que sin saberlo me recibí de mariquita en el Club Comunicaciones (dónde más!! Si crecí ahí adentro y cuanto de testosterona familiar ahí!!).
En mi caso el contacto con el fútbol ya es casi un destino, por más que quiera zafar, no hay forma… siempre hay fútbol por los rincones de la casa y las reuniones familiares se sostienen a partir de ahí.
Tuve que resignificarlo, hacer algo con él para poder bancármelo, es difícil… siempre hay algo de la violencia que me queda rebotando… Pocas veces sentí tanta alegría como la última clase de gimnasia de quinto año en que supe que fue mi último partido de fútbol!!!
La forma de poner mi mirada del fútbol, entonces, va en ese collage donde se juega mi concepto de la chonguez tal como me gusta verla.
A jugar un picadito mixto de tortas y putos! Eso sí!... que las tortas no peguen, por favor! Yo por las dudas me pongo unas canilleras vio? (jaja me imaginé con canilleras y botines… eso sí que sería travestirme)… En fin… se las dejo picando… y los invito a exorcizar sus experiencias con el fútbol…

miércoles, 29 de agosto de 2007

Leda y María - Entre valles y quebradas II


Con este posteo inauguro en el blog una sección que va a despuntar uno de mis mayores vicios: regalar y difundir la música. Cuando me encuentro con algún disco o artista que me guste mucho, suelen agarrarme unas ganas irrefrenables de que todo el mundo lo escuche y sienta eso que yo siento al escucharlo. Por este medio voy a intentar que algo de eso pase, más allá de las diferencias de ritmos, tiempos y momentos de cada uno para la música.
La idea es compartir discos, comentarlos entre todos. Esta no es una idea novedosa, hay muchos blogs que se dedican exclusivamente a esto. En este caso la diferencia es que ésta será sólo una sección del blog, una manera más de comunicarnos. Recomiendo altísimamente el blog
Aguante la cofradía
ya que es el blog pionero en esto de compartir los discos y uno de los más completos, sin dudas!
Voy a centrarme específicamente en aquellos discos que sean difíciles de conseguir por estar fuera de catálogo o por no haber sido editados en cd directamente. No tengo intención de quitarle el trabajo a nadie, ni de promover que los artistas no puedan grabar sus nuevos materiales porque no venden. Simplemente pretendo que aquello que ya grabaron siga siendo escuchado, pues para eso está.
Yo pienso que la música es parte del patrimonio cultural de un pueblo, de una sociedad. Como tal la música es identitaria en tanto nos define como lo que somos. Es así que los pueblos resisten y se proclaman cantando. Me parece atroz que la música (así como los libros y demás manifestaciones de la cultura) estén sujetas a las leyes del mercado sin que se asegure la permanencia de aquello que la gente asume como propio. Me violenta que el acceso a la cultura sea tan pero tan complicado, que para conseguir un disco o un libro haya que caminar sin rumbo, indefinidamente para ver si por casualidad aparece.
Como dice Teresa Parodi: “Nos han robado hasta la primavera, pero no pueden con nuestra canción” y desde acá también vamos a hacer fuerza en ese sentido.
El primer disco que quiero compartir se llama Entre valles y quebradas II, es de 1957 y lo grabaron Leda Valladares y María Elena Walsh cuando conformaban el dúo “Leda y María”.
Comparto este disco por varias razones. En primer lugar porque las voces e interpretaciones de estas dos mujeres me parecen sinceramente de LUJO, brillantes, impecables. Leda Valladares, con gran autoridad interpreta folklore del norte argentino y canto con caja. María Elena Walsh, con su particular timbre de voz, agrega matices, color y textura a las canciones logrando arreglos de voces que son geniales.
Las canciones además, son clásicas, muchas de ellas anónimas y pertenecen al acervo cultural del pueblo que, en principio ellas dos y luego Leda en solitario, se dedicaron a rescatar y registrar.
Si tuviera que destacar algunas canciones en particular, sólo por gusto personal mencionaría “Vidalita”, “La artillera” (esta canción es muy intensa en letra, música e interpretación) o "El pajarillo".
Espero que disfruten de este disco tanto como lo hago yo y pronto compartiremos más música.

Temas:

01 – Tonada de La Quiaca (tonada) (erquencho por Rodrigo Montero)
02 – El paisanito (canción tucumana)
03 – Naranja de Orán (baguala salteña)
04 – Bailecito de Manzanares (tema popular de Jujuy)
05 – La palomita (vidala riojana)
06 – La artillera (zamba popular)
07 – Mi fortuna (vidala riojana)
08 – Huachi torito (villancico riojano)
09 – Vidalita (motivo popular de La Pampa y el Litoral)
10 – El pajarillo (cueca norteña) (quena por Rodrigo Montero)
11 – Pobre mi negra (vidala santiagueña)
12 – Una canastita (carnavalito de la Quebrada de Humahuaca)

Aclaración: Enmendé el título del post y el link ya que el disco si bien es "Entre valles y quebradas" no es el volumen I (como había publicado en un principio), sino el volumen II.
Por diferencias de ediciones entre el vinilo y el cd me confundí y lo postée equivocadamente. Pido a todos los que lo hayan bajado que por favor enmienden el error para que éste no siga propagándose. Los que lo bajen de ahora en más recibirán la información acorde al contenido que están descargando.
Disculpen por la errata, pero a veces sucede.

lunes, 27 de agosto de 2007

Vinitos guitarreados


Las últimas semanas estuvieron plagadas de “vinitos guitarreados en un remanso de amigos”. Hacía mucho tiempo que no cantaba tantas horas seguidas. Carpetas enteras de cancioneros transitadas hoja por hoja. Las noches en La Peña del Colorado han sido una buena excusa para sacar a relucir el costado telúrico y para cantar entre todos, con el aporte de todos. Una de las noches de Peña, charlando con Adrián, copa va, copa viene, nos colgamos mirando a un guitarrero que, tan feliz como circunspecto, tocaba la viola para todo un salón lleno de gente. La imagen de repente nos tomó por asalto a los dos. Nos miramos como saliendo de la escena para ver la fotografía. Un festín de gente cantaba. El buen hombre nucleaba el festejo con sus acordes. Adrián, siempre sesudo, me dice “Pensar que éste debe ser uno de los momentos más felices de su vida”. Lo miré, hice silencio, contemplé la escena nuevamente, nos contemplé en la escena y le respondí: “Acaso viviste momentos mucho más felices que éste?? No sos feliz así?” Asintió con una leve sonrisa y seguimos cantando con todos.
Colgado con esa escena en la semana, y por las sucesivas situaciones de canto colectivo, me puse a pensar que toda la vida fueron parte de los momentos más felices. Quise teorizar los motivos y lo único que se me ocurrió es que el canto colectivo es una forma de movilizar nuestra memoria, de poner de manifiesto lo aprehendido a través de los textos y las melodías. Todo esto con el efecto multiplicador de estar rodeado de gente que atraviesa el mismo trance. Es como si tuviera una suerte de efecto dado por las energías que se suman. Se me plantea acá una palabra que nos ha robado el catolicismo para invadirnos el cuerpo, pero que en su esencia es una palabra liberadora: Comunión. Esa es la definición más cercana, comunidad, elementos en común, no borrando lo que cada uno es, sino partiendo de allí... Que felicidad la de cantar así… Gracias a todos mis compañeros de música de estos últimos días, prometo insistir para que todo esté dispuesto para seguir!

“Y traigo mil canciones
como leñita seca
recuerdo de fogones
que invitan a matear…”

viernes, 17 de agosto de 2007

Mi travesti


Siempre digo que en el 2000 me asumí puto... En el 2001 me asumí torta y en el 2006 me asumí trava... Ojalá siga encontrándome costados que me completen y que me multipliquen. Esta foto con sus matices, su composición, su estética y su belleza me inspiró escribir estas líneas dedicadas a ese costado que tanto quiero...


Mi travesti

A vuelo de tacos y pollera
mi travesti, la cara oculta de mi luna
escondida en mis espejos refractarios
mi travesti, agazapada de flores marchitas.

Piedra libre, postal de juegos infantiles
galardón de hembra imaginaria
mi travesti, per-signada de belleza
mi travesti, amoratada de orfandad.

Anhelos de fémina lograda
paga libertad con cuerpo
paga cuerpo con libertad
mi travesti, dueña, lúdica y gestual.

Mi desparpajo, mi costado
mis tetas, mi belleza otra
mi conquista, mi amor
mi travesti.
PD: Aclaro que el de la foto no soy yo, es un amigo.

viernes, 10 de agosto de 2007

Alma guaraní


El pasaje de ida esta vez me llevó a las tierras coloradas de la provincia de Misiones, a las Cataratas del Iguazú y las ruinas de San Ignacio. El contexto de la selva, la vegetación frondosa, la exuberancia. La triple frontera, el Brasil y el Paraguay que más que separarse de la Argentina por el río Paraná, se convidan a beber de la misma agua. El alma guaraní como eje, como espíritu, aún a pesar de la pobreza del pueblo aborigen y los lugareños, inentendible si pensamos que son dueños de una tierra paradisíaca que es visitada por turistas de todo el mundo.
La garganta del diablo es algo sencillamente espectacular, magnánimo, magnífico en sus proporciones, colores, sonidos y belleza. Tiene un nombre mitológico, como todo aquello que no tiene explicación, que escapa lo asequible y se presta sólo a los sentidos porque la razón le es poca cosa. Podría ubicarla junto con el Cerro de los siete colores o el Río Arrayanes, entre los paisajes más hermosos que alguna vez tuve la suerte de ver.
Es muy difícil de describir, pero imagínense un río de agua verde transparente en el medio de la selva. Abruptamente, el río se cae por paredones de piedra de aproximadamente 60 metros de altura y el agua, que es verde, en el camino se va transformando en tonos de ámbar y amarillos hasta estallar en espuma blanca que choca entre sí desparramándose por el aire. Además, tuve mi bautismo guaraní gracias a una lancha que me llevó bajo las aguas del salto San Martín. Ahora me llamo Irupé en mis días litoraleños.
La circunstancia del río que todo lo rodea. Piel de barro, fabulosa lampalagua, remarcaba Sergio ante el Paraná. La geografía que tiene la capacidad de configurar al hombre y sus posibilidades y formas de ver la vida.
Esas fueron las impresiones que como postales se me fueron grabando a medida que iba transitando el paisaje.
Lo demás fue lo anecdótico, pero para nada menos importante. Cada vez que viajamos con Sergio encaramos la tarea casi antropológica de identificar a las maricas, tortas, travas o queers del pueblo, encontrarlas, saber cómo viven, qué piensan, cómo se encuentran, cómo circulan, si pueden visibilizarse o no. Encontrar putos en guaraní no fue tarea tan fácil, pero no fracasamos. No fueron todo lo guaraníes que hubiéramos querido, pero pudimos averiguar que en Puerto Iguazú no hay ningún espacio de circulación queer específico, que hay que ir al Brasil para eso. También sabemos ahora que no son pocas las dificultades para hablar en el pueblo y que sin embargo, hay por lo menos una travesti que se hace no pocos mangos laburando ahí.
Lo interesante de este viaje en el sentido queer fue que sin lograr encontrar un espacio de encuentro específico fueron apareciendo como ojos ocultos en el medio de la selva, los distintos personajes que fueron acercándonos la data que queríamos encontrar.

Alma guaraní
(Osvaldo Sosa Cordero – Damasio Esquivel)

Raza del guayakí
la selva no te ha olvidado,
tu alma guaraní
perdura en el suelo amado

Y desde el verdor del monte natal
la brisa sutil del tiempo estival
nos vuelve a traer tu voz secular.

Es la misma que ayer
echaba a volar al viento
cuitas de un querer
con hondo y nativo acento

Es la voz racial que no morirá
mientras que el crisol de algún mbaracá
su pena o su amor convierta en cantar...

Alma guaraní
quietud de los naranjales
alma guaraní
lamento de los yerbales
vibra tu tradición
en la luz y en la flor.

Lo mismo que el manantial
sin ningún rumor aflorando vas
y en ruego de amor bendiciendo estás
alma guaraní, la heredad natal...

miércoles, 1 de agosto de 2007

El viaje iniciático

Hola a todxs!


Las ganas de escribir en un blog eran muchas. Las vueltas que dí para llegar a hacerlo fueron aún más. Me siento como en el viejo folletín. Escritura por entregas, como si fueran capítulos de una historia que se va hilvanando con el único eje del espacio. La idea es viajar, recorrer diferentes costados, aristas, de cada uno, de todos.
Quise definir un perfil para el blog, buscar un tema troncal que estructure el contenido, una intención, una propuesta puntual a la que apuntar y finalmente me dí cuenta de que lo que en realidad quiero es simplemente compartir, movilizar y que el eje somos las personas que podamos participar de él.
El nombre fue un gran dilema... había días que buscaba por el lado del grotesco, de lo bizarro ¡que tanto me atrae!... otros días quería lo cotidiano, lo simple, lo prosaico ¡que siempre me llegó con tanta más fuerza que lo elevado por canónico o culturoso!... busqué también un nombre queer o alguno que rescatara la idea del viaje, lo que más nos gusta en la vida... hasta que ayer charlando con un amigo de Posadas por el MSN surgió el nombre que resolvió todos los dilemas: Pasajes de ida (Pasaje fue la versión original)...

Pasajes de ida me resultó interesante porque creo que todos los viajes son en una sóla dirección, las vueltas son ficticias porque uno simplemente regresa, y ese regreso es geográfico, de kilómetros, pero jamás puede estarse como se estaba en el punto de partida. Viajar es poner en ejercicio todo lo que somos y traemos, en virtud de la libertad de un mundo que se nos ofrece delante de los ojos para descubrir. El otro, su cultura, sus pareceres, sus cosmovisiones se presentan como realidad contundente que invita a dialogar y poner en ejercicio esas cosas que venimos cargando. Modificar las mochilas que llevamos es la cuestión... dejar algunas cosas que no nos sirven, dotarnos de otras que necesitamos descubrir...

Es archiconocida la metáfora de que la vida es un viaje. Los momentos, las emociones, los procesos... las distintas estaciones ("Y en cada estación, el miedo a seguir... saber que crecer es ir... es ir... es ir....).

Pasajes de ida además remite a una canción de Marilina Ross (a quien quiero tanto por haberle puesto voz a muchos de mis silencios), y yo la relaciono con lo queer porque la salida del closet es un proceso del que no se vuelve, aunque muchas veces se tenga la frente marchita...

Pasajes de ida también tiene que ver con lo cotidiano, si uno puede hacer uso de la sensibilidad que nos permite adentrarnos en lo que tenemos enfrente, transformarnos a partir de eso...

Ahora los invito a que me acompañen, a que se sumen, a que discutamos, a que charlemos... como si tomáramos mates todos juntos... como si la viola estuviera sonando y entre canción y canción surgieran ideas... Espero que podamos compartir muchos viajes cotidianos que sean ventanas, puntos de fuga de nuestro trajín diario y que nos encuentren.... que nos hagan encontrar.... que perderse un rato sea para traer nuevas cosas y seguir andando...

Chris

Pasaje de ida
(Marilina Ross - Cristina Banegas)

Después de tanto andar queriendo siempre volver, volver
volver a los lugares que más quiero
la casa de mi infancia,
el compinche de los juegos
y aquella bicicleta para llegar al cielo

Y en cada estación
el miedo a seguir
saber que crecer es ir... es ir... es ir...

Después de tantos trenes y barreras
buscando la ciudad para vivir
encontré la mirada que me hubiera hecho feliz
y conocí el pueblito donde quisiera morir

Y en cada estación
el miedo a seguir
saber que crecer es ir... es ir... es ir...

Después de atravesar tantas fronteras
algunas hacia el sol y otras al frío
gané y perdí mi tiempo,
mi dolor y algún amigo
y todo siguió viaje siempre adentro mío

Después de tantas cartas y regresos
cargando las valijas y los sueños
mi corazón de viaje quiere andar sin equipaje,
sacar sólo en la vida,
pasaje de ida
pasaje de ida
pasaje de ida

Vamos todavía, María!